Segun un estudio publicado por psicólogos de la UNAM, tocar un instrumento musical aporta los siguientes beneficios en las personas, sin importar su edad o género:
- Incrementa la confianza en uno mismo
- Genera relaciones sociales más profundas
- Desarrolla la creatividad en la solución de problemas cotidianos
- Incrementa la productividad y concentración
- Ejercita la memoria
- Reduce el stress
- Disminuye la presión sanguínea
- Disminuye la depresión
- Mejora la acertividad
- Se vive más feliz
Pero además, yo que lo estoy viviendo y conozco a mucha gente que también lo vive, quiero resaltar ciertos aspectos de los que me he dado cuenta por mí mismo y que considero muy interesantes e importantes para nuestra vida:
Crea hábito de estudio. Fomenta la constancia en las cosas. Eso es porque el hecho de tener que practicar dicho instrumento con cierta frecuencia (o mucha si quieres progresar a un cierto nivel).
Da valores de la disciplina, el sacrificio y el trabajo de lo que cuesta hacer las cosas bien hechas, porque aprender a tocar un instrumento bien, no se consigue sino siendo muy disciplinado y trabajando mucho.
Desarrolla la sensibilidad, sobretodo si se trata de intentar interpretar piezas de música clásica, ya que están cargadas de sensibilidad, de sentimientos. También se puede aplicar a la sensibilidad de nuestro sentido del tacto al aprender a
tener un control mayor sobre nuestro cuerpo.
Genera mayor capacidad mental. Es una realidad comprobada que la música y en general el estudio y práctica de un instrumento, ejercita una muy buena parte del cerebro, lo cual nos hace más ágiles a la hora de pensar cualquier cosa. Y por supuesto, como antes hemos dicho, mejora la memoria.
En fin, ya no se me ocurren más cosas. Espero que después de toda esta explicación le entre a uno ganas de tocar algún instrumento musical!