Como muchos ya sabréis, hace una semana aproximadamente, Alberto Contador (conocido ciclista español) dio una rueda de prensa ante los medios después de salir a la luz una propuesta de sanción del Comité de Competición de un año sin correr y además perder la victoria en el Tour de Francia 2010, y evidentemente la imposibilidad e participar en el de 2011.
Hoy, os quiero traer el video con la rueda de prensa completa, pues no lo había visto hasta ayer, y de verdad creo que para todo el mundo, interesados en el ciclismo o no, les va a interesar, les va a tocar adentro. Yo creo en Contador y en su inocencia, y no hay más que ver el video, y con poco que le hayáis escuchado hablar en la televisión o en la radio, se ve claramente que es un chico humilde y honesto.
Resumiendo el caso para los que no están del todo familiarizados: Meses después del Tour de Francia 2010, un laboratorio europeo detectó un pequeñísima cantidad de clembuterol en su sangre. El clembuterol forma parte de la lista de sustancias no permitidas y está considerado como sustancia dopante.
Alberto Contador y sus medios cercanos declararon que esto se debía haber producido por la ingestión de una carne "contaminada" que se comió durante el Tour. En ningún caso introdujo esa sustancia en su cuerpo voluntariamente.
Contador llegó también a decir ante los medios españoles: "Puedes poner la mano en el fuego y no te quemas. Si hubiera sido un caso claro de dopaje habría salido a la semana. La intoxicación alimentaria fue al comer un filete procedente de España".
Pero no es la primera vez que se meten con Contador, y muchos medios extranjeros hacen fuerza para que se le sancione.
Además de ello, hay que recalcar, que esa cantidad tan pequeña detectada, no hubiera servido de nada en la carrera. Así lo han afirmado muchos cientificos, que dicen que una cantidad tan pequeña no da ningún tipo de efecto.
Y también, algo que Contador dice, que es que esta ley está obsoleta, pues cuando e pusieron las leyes antidopaje, no existían instrumentos capaces de detectar cantidades tan pequeñas, pero sí medían lo necesario como para detectar una cantidad que produjera un efecto dopante sobre el deportista.